Te lanzamos la siguiente pregunta, ¿fue Tenesor Semidán un traidor o un salvador de los aborígenes de las Islas Canarias? Profunda, ¿cierto?

¿Quién fue  Tenesor Semidán? ¿Qué papel jugaba en la sociedad aborigen grancanaria?

Viajemos al año 1478, en ese preciso instante, comienza la conquista realenga en las islas. Los Reyes Católicos deciden enviar a Canarias al hidalgo Alonso Fernández de Lugo y, junto a él, el enorme ejército castellano comandado por el capital Juan Rejón.

A partir de ese momento, arranca la conquista de la isla de Tamarán, la invasión definitiva de la actual isla de Gran Canaria.

Allí suceden continuas batallas entre castellanos y canarios. Los aborígenes luchan incansables para defender su hogar, protegen las tierras que les pertenecen por derecho ancestral y que los conquistadores les quieren arrebatar.

En esa época, Tenesor Semidán se convierte en el Guanarteme único de la isla de Tamarán. Tras la muerte de Egonaiga, el Guanarteme de Gáldar, y Bentagoia, el Guanarteme de Telde, ni Bentejuí ni su hermana heredaron en ese momento las tierras. No estaban capacitados para regir la isla, eran muy jóvenes para gobernar Tamarán.

Durante su mandato y con la inestimable ayuda de Doramas, Tenesor lidera las batallas más importantes y feroces acontecidas en la isla como, por ejemplo, la batalla de Guiniguada, Tenoya y Tirajana e incluso el combate que provocó la destrucción de la Torre de Gando, principal punto de los conquistadores en Gran Canaria.

Sin embargo, a pesar de la fortaleza de los isleños y las bajas de las tropas castellanas, el bando canario se fue debilitando y, poco a poco, los conquistadores castellanos empezaron a ganar terreno.

Ante esa situación, los Reyes Católicos decidieron sustituir a Juan Rejón por Pedro de Vera y, por primera vez, el hidalgo y conquistador castellano llegó a tierras grancanarias.

Por su parte, los aborígenes grancanarios hacen frente a Pedro de Vera y envían al frente a Doramas. El pueblo aborigen tenía depositada gran parte de sus esperanzas de victoria en las capacidades de lucha del gran guerrero, pero muere apuñalado por la espalda por el hidalgo Pedro de Vera. Justo ahí, en la Batalla de Arucas, comienza el fin del reinado aborigen en la isla.

Según algunas fuentes, Tenesor Semidán fue apresado y llevado a la península. Y, curiosamente, el 30 de mayo de 1481, el guanarteme llega a un acuerdo con los Reyes católicos. Un 30 mayo, Tenesor Semidán firmó el conocido Pacto de Unificación de Canarias con España, el llamado Pacto de Calatayud.

Ya hablaremos en profundidad del Pacto de Calatayud, porque algunas fuentes aseguran que no sucedió tal y como se cuenta

A partir de ese momento, el 30 de mayo de 1481, las Islas Canarias se incorporaron a la Corona, la misma fecha en la que se constituyó el Parlamento autonómico, el Parlamento de Canarias, el mismo día en el que año tras año celebramos el Día de Canarias, ¿casualidad?

A esa pregunta no tenemos respuesta, pero tenemos que reconocer que, cuanto menos, resulta curiosa la coincidencia, ¿verdad?

¿Y qué pasó a partir de ese momento? ¿Qué sucedió cuando Tenesor Semidán llegó a la península? 

Tenesor Semidán fue capturado por los conquistadores tras la Batalla de Arucas, pero, en la isla de Tamarán, algunos aborígenes aún resistían a los ataques de los conquistadores.

Por aquel entonces, sobre el año 1482, Abenchara, la esposa de Tenesor Semidán, estaba embarazada y, algunas fuentes, aseguran que fue secuestrada por los conquistadores y llevada a la Corte, donde dio a luz a finales de septiembre.

En cambio, otras fuentes indican que no fue capturada, sino que viajó junto a Tenesor Semidán tras ser este apresado tras la Batalla de Arucas.

Como prueba de la poca claridad de los registros, algunos relatos indican que Tenesor Semidán fue capturado junto a otros destacados líderes canarios, como Maninidra, en el año 1483. Algo que chocaría con el hecho de que su hija Guayarmina naciera en 1482, como indicamos anteriormente.

En cambio, se sabe que Tenesor Semidán fue bautizado por el propio Rey Fernando en el verano de 1482, momento en el que pasó a nombrarse Fernando de Guanarteme en honor al rey. Luego, tras meses en la corte junto a los reyes católicos, se reencontró con su esposa.

Ante la ausencia de Tenesor Semidán en la isla y bajo las órdenes de Guayarmina Semidán y Bentejuí, los aborígenes grancanarios resisten a los ataques de los castellanos.

Y entonces, Fernando de Guanarteme regresa a Gran Canaria

Ese mismo año, Tenesor Semidán (Fernando de Guanarteme) regresa a la isla de Tamarán para transmitir el acuerdo que había firmado con los Reyes Católicos.

Dicho pacto consistía en rendirse y convertirse al cristianismo. En definitiva, que Canarias se incorporara al Reino de las Españas. A cambio, los castellanos prometían respetar las estructuras políticas y sociales, las costumbres culturales y la libertad de los guanches, algo que ya sabemos que no sucedió.

Algunos aborígenes canarios vieron con buenos ojos el pacto propuesto por los castellanos y decidieron seguir a Tenesor Semidán. Posiblemente, desesperanzados por perder a su líder Doramas, cansados tras años de lucha y con la esperanza de tener un futuro mejor.

En cambio, un grupo de aborígenes grancanarios liderados por Guayarmina Semidán y Bentejuí no aceptaron la rendición y decidieron refugiarse en las cumbres de Gran Canaria. Una vez allí, no dudaron en enfrentarse a los castellanos que hasta allí se acercaban, como así sucedió en la conocida Victoria de Bentayga.

Por otro lado, Tenesor Semidán intentó convencerlos sin éxito, Bentejuí y su faycán Faya se negaron rotundamente a la rendición.

Y justo ahí, en la Fortaleza de Ansite y rodeados por el abrupto barranco e inmensos roques, llegó el día en el que Bentejuí y su faycán Faya decidieron acabar con sus vidas antes de ser capturados por los conquistadores.

Por otro lado, la princesa Guayarmina, hija de Tenesor Semidán, y su prima Masequera, hija de Egonaiga, aceptaron la propuesta y abandonaron la lucha.

Una vez dada por finalizada la conquista de Gran Canaria, los Reyes permitieron a Tenesor Semidán que viviera en sus tierras de Gáldar con cuarenta de sus parientes. Sin embargo, no todas las promesas de los Reyes Católicos se cumplieron, siendo el propio Tenesor Semidán afectado.

Tanto es así que, alrededor del año 1490, el cabildo de Gran Canaria pidió y consiguió que se deportara a una parte de los 150 familiares que por aquel entonces conformaban sus parientes.

Como ya comentamos en los Podcast de Guanchipedia, Tenesor Semidán participó activamente en la Conquista de La Palma y Tenerife junto a una parte de su familia. Pero eso mejor lo contamos otro día, ¿no crees?

Debemos destacar que, durante los meses que pasó en la corte, Tenesor Semidán contempló la grandeza del ejército castellano (netamente superior a las defensas canarias), lo que pudo hacerle comprender que la victoria nunca sería posible y que el pacto era la única opción para el bienestar de su pueblo.

No podemos descartar que también le guiaran las ansias por mantener y consolidar su poder, el reinado de la isla de Tamarán. Tanto es así que, ya bautizado como Fernando de Guanarteme, se le otorgó el título de “Don” que en la época se reservaba a los nobles y era concedido por licencia real (el mismo que obtuvieron los Menceyes de Paces en Tenerife).

Y tú, ¿qué crees?, ¿es Tenesor Semidán un traidor o un salvador de los aborígenes de las Islas Canarias?

 

– Fotografía del Roque de Bantayga de Martin Wiesheu – Flickr (CC BY 2.0)

https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=357978

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